Académicos/as UTalca estudian frutas chilenas para producir alternativas farmacológicas
Buscan aprovechar las propiedades de la pared celular de la frutilla, calafate y papaya para mejorar las condiciones de salud de las personas.
Autor: Daniel Pérez Terán | 31 marzo 2023
Estudiar las propiedades de la pared celular de frutas como la frutilla, calafate y papaya, para así aprovechar sus propiedades para alternativas farmacológicas y agroindustriales, es el objetivo de una investigación emprendida por académicos/as del Instituto de Ciencias Biológicas de la Universidad de Talca.
Este trabajo forma parte del proyecto Anillo denominado (Chicobio) “Componentes de la pared celular de la fruta chilena como recurso biotecnológico”, liderado por la académica María Alejandra Moya, y en el que participan investigadores/as de las universidades de Talca, de Chile y Andrés Bello.
“El proyecto pretende estudiar estos frutos nativos y usar sus residuos generados por la agroindustria para poder obtener nuevos productos que puedan tener uso farmacológico o de salud, como, por ejemplo, ayudar a la movilidad de los alimentos en el tracto digestivo, explicó la investigadora”.
“Asimismo este proyecto nos permitirá obtener información genética y molecular de estos frutos que no han sido descubiertas, y que podemos usar para nuestro beneficio. Queremos generar un gran aporte biotecnológico”.
Actualmente, el proyecto cumplió su primer año de ejecución de los tres que están proyectados. En ese periodo han logrado avances importantes que fueron presentados en el Congreso Internacional de Genómica de Rosáceas, celebrado en Nueva Zelanda del 13 al 16 de marzo. En esta instancia, Moya fue la única chilena participante como ponente.
“Mostramos los avances que tenemos en nuestra investigación, en específico los componentes biológicos que participan en el desensamblaje de la pared celular y que están presentes en distintos momentos de maduración de la fruta. Es decir, informamos a la comunidad científica internacional qué nuevos elementos biológicos están participando desde el desarrollo de la fruta hasta su maduración”, explicó la académica.
Proyecto Anillo
Este Proyecto Anillo ha generado diversas posibilidades de desarrollo al Instituto y la Universidad, así lo informó el investigador principal del proyecto, el académico Raúl Herrera, quien indicó que esta iniciativa permite fortalecer la formación académica de estudiantes de pre y postgrado, aumentar las redes de colaboración internacional, desarrollar investigación de frontera y vincularse con el medio.
“Para nosotros también es importante que este proyecto sea una oportunidad de crecimiento y generación de nuevos conocimientos para estudiantes de Bioquímica, para perfeccionar sus líneas de trabajo y conocer a académicos extranjeros. Ejemplo de ello es el trabajo de la estudiante egresada del Doctorado en Ciencias, mención Ingeniería Genética Vegetal, Claudia Gómez, quien recibió un premio a la mejor presentación y fue destacada por un panel de expertos internacionales”.
“Asimismo, como es un proyecto asociativo, hemos concentrado parte de nuestros esfuerzos en consolidar una red nacional e internacional en esta temática. Por tal sentido en diciembre pasado organizamos en Campus Santiago una jornada de investigación con la participación de varios colegas de universidades europeas, a quienes pusimos en conocimiento nuestro trabajo con el Anillo. Esperamos replicar una jornada similar durante este año”, añadió el académico.
Por otra parte, Herrera subrayó que además del trabajo científico, el proyecto ha realizado actividades de vinculación con el medio para motivar a las nuevas generaciones a estudiar ciencias.
“Realizamos la quinta versión del Campamento Científico en Linares, en la cual durante una semana escolares recibieron charlas, realizaron actividades de laboratorio y elaboraron proyectos de investigación”.
“Otra iniciativa en que hemos participado es la creación de un Concurso de Bioquímica y Biología Celular, en la cual convocamos a estudiantes de enseñanza media a participar de una prueba que se realiza a través de la plataforma Liceo Virtual. Se ha incrementado el interés de los jóvenes, pues el año pasado participaron más de 120 estudiantes de distintas regiones del país”.