Científicos descubren que el trébol blanco evoluciona distinto en las zonas urbanas y rurales

El trabajo incluyó a más de un centenar ciudades de todo el mundo, la que concluyó que las ciudades, de alguna forma, están actuando como fuerza de selección sobre las especies. Dicha investigación fue publicada recientemente en la revista Internacional Science.

El investigador de la Universidad de Talca, Pedro Gundel, participó en un estudio a gran escala, denominado “Global urban environmental change drives adaptation in white clover”. El estudio, publicado en la prestigiosa revista internacional Science, incluyó 166 ciudades del mundo y 288 autores.

El objeto de estudio fue el trébol blanco (Trifolium repens), ya que es una especie cosmopolita, es decir, da la posibilidad de evaluarla en muchas ciudades de todo el mundo. Así también, es una especie importante que se utiliza como alimento para el ganado y también en césped.

La investigación consistió principalmente en estudiar la variación de un carácter (i.e., la capacidad de las plantas de producir compuestos cianogénicos) en gradientes urbano – rurales.

Estos compuestos brindan a las plantas protección contra el ataque de los herbívoros. En cada una de las 166 ciudades, se muestrearon poblaciones de trébol blanco siguiendo una línea (transecta) desde el centro de la ciudad al campo.

Se esperaba que la frecuencia de plantas cianogénicas en las poblaciones de trébol blanco fuera mayor en la parte rural, pues es allí donde hay mayor cantidad de herbívoros. Por el contrario, la frecuencia debería ser baja en las ciudades debido a la baja cantidad de herbívoros.

Pero según indica el académico del Instituto de Ciencias Biológicas, Pedro Gundel, los resultados no fueron tan simples y directos como se esperaba. “Si bien hubo ciudades en las cuales no hubo variación en la frecuencia de plantas cianogénicas, el patrón esperado fue detectado en el 47% de las ciudades evaluadas. La importancia del estudio es que las ciudades, una de las mayores expresiones del impacto del ser humano en la tierra, actúan como fuerzas de selección sobre las especies y estas responden evolucionando.”

“Este trabajo es el primero en mostrar que las ciudades no solo afectan lo más evidente (por ejemplo, la biodiversidad general) sino que también afectan a las poblaciones de una misma especie. Es decir que, dentro de una misma especie, los individuos de trébol blanco del campo y la ciudad son genéticamente distintos”, complementó Gundel.

Este trabajo deja abiertas muchas preguntas. Una de ellas podría ser que el grado de contaminación (lógicamente más alto en las ciudades) sea más importante que la herbivoría en seleccionar por una u otra característica en el trébol.

Al respecto, señaló el académico que actualmente se encuentran trabajando con sensores que, montados en satélites, permitirán estimar la contaminación gaseosa en las ciudades. Eso, no solo va a permitir caracterizar de otra manera la diferencia entre las ciudades y el campo, sino que, además, va a permitir clasificar a las ciudades según su grado de contaminación.

“Entonces, si fuera que la contaminación explicara mejor la variación en la frecuencia de plantas cianogénicas, podríamos utilizar a las características del trébol blanco como una especie sensible e indicadora de contaminación ambiental”, finalizó Gundel.