Recientemente, en la Universidad de Talca se destacó y valoró el compromiso de los/as colaboradores/as que cumplieron 20, 25, 30, 35, 40, 45 y 50 años de trabajo en la Casa de Estudios.

Este es el caso de Cecilia Sepúlveda Yévenes, asistente de Dirección del Instituto de Ciencias Biológicas, quien hace 25 años trabaja en la Universidad de Talca. “Los tres primeros años trabajé en la facultad de Ingeniería Forestal y luego, fui trasladada al ICB. Aquí llevo más de veinte años trabajando”, recuerda alegre Cecilia.

¿Qué es lo que más destaca de toda su trayectoria en la Universidad?

“He crecido junto con la universidad, ha sido un aprendizaje y eso lo valoro mucho. Destaco el ambiente laboral, la infraestructura que disponemos para trabajar, ese es un valor muy importante. Tengo el espacio y todos los implementos para desenvolverme. El hecho de estar constantemente capacitándonos, es un constante aprender. El reconocimiento, eso también es algo importante. Sentir que reconocen el trabajo que se está haciendo, aunque uno sea un granito de arena”.

 Y de su trabajo en el Instituto de Ciencias Biológicas, ¿qué es lo que más destaca?

“La humanidad y la sencillez de la gente que trabaja en el ICB. La comprensión, el compañerismo y por sobre todo, la solidaridad. Alguien tiene una dificultad y todos nos apoyamos”.

Ámbito familiar

Cecilia Sepúlveda Yévenes, es mamá de Camila Rebolledo (35 años) y Martín Rebolledo (24 años). Ambos estudiaron en la Universidad de Talca. Camila es titulada de la carrera de Derecho y magíster. Martín está cursando Ingeniería Civil Mecánica. “Para ellos es un orgullo su universidad y es doble el agradecimiento, ya que al ser funcionaria, pudieron estudiar con beca”, cuenta Cecilia y agrega, “me hubiese gustado haber compartido más tiempo de calidad con mi hijo Martín. Uno en el trabajo se estresa, a veces las cosas se ponen complicadas y eso se traslada también a la casa. Para las mujeres a veces se nos hace más difícil, hay periodos complicados, tristes y muchas veces no se comprende. En ese contexto estoy muy agradecida de la universidad y de quienes han sido mis jefes. He tenido la suerte de tener buenos jefes, comprensivos, apoyadores, que se hacen cargo cuando pasa algo en el ambiente laboral, y eso se agradece”, señala Cecilia.

Una mujer, madre de dos hijos, asistente de Dirección, quien hace 25 años trabaja en nuestra Casa de Estudios y hace más de veinte años en el Instituto de Ciencias Biológicas. Cecilia Sepúlveda Yévenes, destacada por su gran compromiso y responsabilidad.

 

“Quiero expresar a la Sra. Cecilia, en nombre de nuestro Instituto, nuestro más sincero agradecimiento, por su alto compromiso, su gran dedicación y por su esfuerzo y cariño que nos ha dedicado estos años y también por su paciencia que en muchas oportunidades a tenido para explicarnos una y otra vez los procedimientos a realizar, para que lo que queremos hacer resulte de la mejor forma. Sin duda alguna, la Sra. Cecilia ha contribuido al desarrollo y crecimiento de nuestra Unidad Académica. Miles de gracias y muchas felicidades”, concluyó Simón Ruiz Lara, director del Instituto de Ciencias Biológicas, Universidad de Talca.